Los Swinging Sixties, la década dorada de las libertades por un lado, y del derrumbamiento de la sociedad tal y como se entendía por otro, pero sin lugar a dudas la más influyente, ya que todo lo que sucedió en aquella década sigue teniendo consecuencias políticas y culturales en la actualidad.
Las nuevas prendas tenían que ser ingeniosas e irreverentes sin tener en cuenta la edad de la mujer que las lucía, y Pierre Cardin , supo captar el mensaje a la perfección.
Pierre Cardin (Italia, 1922), se trasladó a París en 1945 donde estudió arquitectura y tras colaborar con Schiaparelli y Dior, en 1950 abre su propia tienda cuando le denegaron trabajar en la casa de Balenciaga.
Revoluciona la alta costura con formas circulares y abstractas, grandes complementos geométricos, estampados inspirados en el op art y pop art y materiales como el vinilo.
Ha sido el primer diseñador en tener un espacio reservado exclusivamente a una marca en unos grandes almacenes, en demostrar que la moda puede ser un proceso creativo y un negocio, y en establecer licencias mundiales para comercializar el prêt-à-porter y difundir así la marca, el estilo y el look “Pierre Cardin”.
Hábil hombre de negocios, su imperio incluye además de teatros y hoteles, el restaurante Maxim’s en París y ahora para conmemorar sus sesenta años en el mundo de la moda la editorial Assouline ha editado el libro Pierre Cardin: 60 Years of Innovation.
Hacía mucho que no entraba por acá y me sorprendió este post tan especial... Merecido homenaje a PC y a sus mejores creaciones, gracias!
ResponderEliminarUn besito:>
Oh, oh, oh... Me encanta.
ResponderEliminarBesos.